Durante nuestra existencia, hemos visto cómo han nacido o se han consolidado muchos proyectos con objetivos similares a los de Ojo de Pescado y que vinculan el cine y las artes audiovisuales con la educación, la infancia y la juventud, posicionando a Chile como un polo de desarrollo en Latinoamérica en estos ámbitos.

Sin embargo, también hemos visto las carencias en la formación de quienes nos dedicamos a estos temas, problemática que se genera por lo incipiente de esta práctica y porque en nuestro país no existen instancias formativas constantes que permitan profundizar conocimientos, comparar y/o conocer metodologías de trabajo de personas y colectivos de otros países que llevan mucho tiempo desarrollando estas experiencias. Como Ojo de Pescado, hemos constatado que estas carencias existen en los profesionales de la educación, el cine y otras áreas que, al igual que nosotros, se dedican a enseñar el audiovisual a niños y niñas, así como también en los profesionales de la industria audiovisual chilena, en la que existe poca o nula especialización en escritura de guiones y desarrollo de proyectos para públicos infantiles en cine y televisión.

Además, estamos convencidos de que cuando hablamos de cine y derechos de la infancia no podemos hacer separaciones, porque no es posible enseñar cine a niños, niñas y jóvenes si no contamos con producción nacional de calidad especialmente hecha para la audiencia infantil, así como tampoco podemos tener un cine y una televisión infantil adecuadas si el medio audiovisual no se acerca a estas audiencias y sus contextos.

Es por eso que durante 2019 vimos nacer el Primer Seminario Internacional para Mediadores de Contenidos Audiovisuales y Niñez “La Infancia Quiere Cine”, que acuña su nombre tras constatar que la niñez y la juventud de nuestro país sí quiere ver cine y ser parte de los procesos de construcción de una cinematografía y producción televisiva chilena que los considere como sujetos de derecho, como ciudadanos y como una audiencia fundamental para hoy; no sólo para el mañana.

En la primera edición de este seminario, más de 60 mediadores latinoamericanos cursaron 14 talleres impartidos por especialistas de España, México, Ecuador, Argentina y Chile, quienes compartieron sus metodologías de trabajo y experiencias, con la finalidad de que los participantes contaran con más y mejores herramientas para el trabajo con la infancia y juventud.